El VIH: un reto para mujeres de Nicaragua

Kenia Regina Sánchez*
Han pasado más de 25 años desde que se detectó a la primera persona con VIH, ahora son 33 millones en el mundo que tienen el virus. Se esperaba que pudiera erradicarse pronto y por el contrario día a día más de seis mil personas lo adquieren.

Nicaragua no es la excepción, son ya más de 3,000 personas las que después de realizarse la prueba dieron resultado positivo. Según Onusida, existe un subregistro, es decir, a muy pocas personas se les ha realizado la prueba y por ende la cantidad en Nicaragua podría aumentar hasta siete veces más.

Si analizamos mejor las estadísticas de personas con VIH en Nicaragua, la mayoría son amas de casa. Muchos se sorprenden por este dato, y es que son estas mujeres quienes quedan en la casa, atendiendo a sus hijos y esperando al esposo con la cena. Pocas de ellas tienen la oportunidad de explicarles que prefieren usar un condón durante su relación sexual; se enfrentan a ofensas, golpes y demás abusos porque existe la costumbre de decir que “los hombres no usan condón con sus esposas”, aunque muchos de ellos hayan sido infieles incluso con otros hombres.

En igual situación se encuentran las adolescentes y jóvenes que inician relaciones sexuales por presión de sus novios y por pena o desinformación no usan un preservativo que les evitará adquirir el VIH, una ITS o un embarazo no deseado.
Esperanza en los Microbicidas
Durante esta semana en la que se está realizando la XVII Conferencia Internacional sobre el Sida, en la ciudad de México, se desarrollan distintas conferencias acerca del papel de los gobiernos, de las organizaciones no gubernamentales y los medios de comunicación. Uno de los temas más importantes que se está abordando es la vulnerabilidad de las mujeres ante el VIH, explicando la importancia de que todas las mujeres, del campo y la ciudad, profesionales y analfabetas, se sientan capaces de decidir sobre sus vidas, conozcan acerca del virus y sepan cómo prevenirlo.

Muchos biólogos presentes en la Conferencia comparten la propuesta de promover los microbicidas, éstos son un tipo de gel que la mujer utilizaría durante las relaciones sexuales y evitaría la entrada del virus hacia el cuerpo. Sería una gran revolución, ya que las mujeres podrían decidir y evitar por ellas mismas aumentar los 17 millones de mujeres con VIH. Sin embargo, todavía falta tiempo para lograr conseguirlo y que luego, además, esté accesible en las farmacias.

El objetivo de esta conferencia es fortalecer la lucha contra la epidemia, de modo que en poco tiempo se disminuya, en la mayor cantidad posible, el número de personas que adquieran el VIH. Es un reto para el mundo y por ende para Nicaragua.


*Periodista de Puntos de Encuentro y de la Red de Comunicadores para el Abordaje del VIH y el sida en Nicaragua